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Trombocitemia

¿Qué es la trombocitemia?

La trombocitemia es un trastorno mieloproliferativo (cuando la médula ósea produce glóbulos rojos, blancos o plaquetas en exceso). Se caracteriza por la producción de demasiadas plaquetas en la médula ósea. Demasiadas plaquetas hacen difícil la coagulación normal de la sangre. Esto puede resultar en exceso de coagulación o insuficiente coagulación.  

¿Qué causa la trombocitemia?

No existe ninguna causa conocida para la trombocitemia. Se cree que es causada por mutaciones a los megacariocitos, las células que producen plaquetas en la médula ósea.

¿Cuáles son los síntomas de la trombocitemia?

A continuación se enumeran los síntomas más comunes de la trombocitemia. Sin embargo, cada individuo puede experimentarlos de una forma diferente. Los síntomas pueden incluir:

  • Coágulos de sangre en arterias y venas, usualmente en las manos, pies, y el cerebro.

  • Hemorragia.

  • Moretones con facilidad.

  • Hemorragia de la nariz, las encías y el tracto gastrointestinal.

  • Heces con sangre.

  • Hemorragia después de una lesión o cirugía.

  • Debilidad.

  • Dolor de la cabeza y mareos.

  • Aumento de tamaño de los nódulos linfáticos.

Los síntomas de la trombocitemia pueden parecerse a los de otros trastornos de la sangre o problemas médicos. Siempre consulte a su médico para el diagnóstico.

¿Cómo se diagnostica la trombocitemia?

Además de una historia médica completa y un examen físico, los procedimientos de diagnóstico para la trombocitemia incluyen exámenes de sangre adicionales para el recuento de sangre y los niveles elevados de plaquetas. En esta prueba es importante excluir otras causas de la trombocitosis reactiva y otros trastornos mieloproliferativos. Puede ser también necesario realizar una aspiración y biopsia de la médula ósea (retirar médula por aspiración o mediante una biopsia con aguja con anestesia local).

Tratamiento de la trombocitemia

El tratamiento específico de la trombocitemia será determinado por su médico basándose en lo siguiente:

  • Su edad, su estado general de salud y su historia médica.

  • Qué tan avanzada está la enfermedad.

  • Su tolerancia a determinados medicamentos, procedimientos o terapias.

  • Sus expectativas para la trayectoria de la enfermedad.

  • Su opinión o preferencia.

El tratamiento puede incluir:

  • Quimioterapia. Casi siempre es administrada con hidroxyurea, un medicamento de quimoterapia oral, o interferón alfa.  

  • Plaquetoféresis. Procedimiento para quitar las plaquetas extra de la sangre.

 

 

Última revisión: 11/1/2018
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